domingo, 25 de mayo de 2008

La Razón

Habla el Sombrero Ente luz:

- "Debemos recordar, que solo podemos confiar en las - luces naturales, - mientras el mismo "Dios", no nos revele algo, en contra de ellas; debemos, además, tener siempre muy presente; como la más alta de las reglas; que lo que (hoy) nos ha sido revelado por "Dios", hay que "creerlo" (con Fe); como lo más cierto de todo; aunque la luz, de la razón, nos mostrase con toda claridad algo "diferente"; debemos, con todo; confiar, en la autoridad divina, por encima de nuestro propio juicio". - (R. Descartes. 1596-1650.)

- Al mediar el siglo XIX, la mentalidad humana, cargada de “nihilismo”; iba a recibir un importante refuerzo. La teoría darvinista de la evolución; síntesis sistemática, de atisbos anteriores; que daba base, casi metafísica, a la doctrina del progreso. Al descender, el hombre, de antepasados bestiales; en los que lentamente, ha ido germinando la razón; así, la continuidad, de la selección natural, impone, el mejoramiento y perfección de la especie. - (Tomado, parafraseando, de “Después del Socialismo” ; de Pablo Casaseca J. Ed. Benzal. 1968. Pág. 86.)

Pero, una vez establecida, en el espacio sideral, la existencia de vida (inteligencia y razón) de manera "independiente" ; con *voluntad propia e individualidad; con auto-capacidad de traslado; lo demás es circunstancial; su tiempo y su lugar, son suficientes para llenar el vacío del hombre, por cuanto, es “Divina”, es la misma "substancia" de Dios, desde Adán. Es el tiempo de Dios, es el espacio de Dios; y por tanto; es su propia dimensión. Luego, como seres vivos con “alma” e inteligencia, con capacidad de razonar, somos "unidimensionales" con Él; porque, de Él venimos y a Él vamos. Como sus hijos (producto de su propia creación); somos parte de su substancia (alma / intelecto); y de su escencia (espíritu de vida) transferida a la carne. Por lo que somos, uno, con Él, y Él, uno, con nosotros. Así, al descubrirlo y comprobarlo científicamente; ya no le pediremos perdón (como lo hiciera el famoso sabio moderno S. Hawking. 1942) Sino, que entonces, nos alegraremos por ello, con manifestaciones de Gloria. (Gén. 1:27.)

Habla el Sombrero Ente luz:

- "Los *filósofos suelen hablar de la voluntad, como si fuese la cosa mejor conocida del mundo; así Schopenhauer, nos enseña que la voluntad, nos es conocida por sí misma y conocida completamente, sin fallas ni sobras. Pero, me parece, que también en este caso, procedía Schopenhauer, según el método de todos los filósofos: Es decir, que se apropió un prejuicio popular, exagerándolo. El querer, se me parece, como algo complicado, algo que sólo tiene unidad en la palabra, en la cual tiene sus raíces, el prejuicio popular que se aprovecha de la eterna imprevisión de los filósofos". - (F. Nietzsche. “Más allá del bien y del mal” Ed. Libsa.2000.)

No será una nueva "rebelión"; será una nueva "re-interpretación" que, como seres con "substancia y escencia divinas" (inteligencia / alma) e individualidad; razón y voluntad propia, haremos (la re-interpretación); es lo que, nos diferencia de los animales; que además, nos revela y confirma, que fuimos creados por Dios. - Es la intuición, de la relación: Pasado, presente y futuro, de la vida y de la muerte; es la conciencia, interna y externa, del "universo"; su desarrollo y su transformación eterna. - (Gen. 3:1-24.)

La casualidad (Darvinista) en este caso, no funciona; el hecho de ser éste, un universo tan relativamente joven - solo 13.700 millones de años; comparados con su, - calculada, por A. Einstein (1879-1953) - existencia total; de 65 mil billones de años. (Para nosotros: Una verdadera eternidad.) - Demuestra, que se necesitaría de mucho más tiempo del transcurrido; para generar algo tan “especial”, como el hombre; y que, lo más seguro, es que esto, no pasó en forma fortuita; luego, no es de extrañar, que el cerebro animal; no sea tan inteligente. Así fue, desde el principio; y así será, hasta el final. Que C. R. Darwin (1840-1897; otro anticristo) descanse en paz (sí puede.) Pues, la interpretación de su teoría, espiritualmente dañina por lo diabólica; sobre la evolución de las especies y su selección natural, al ser confrontada, erróneamente, con la naturaleza humana; solo sirvió para confundir y retrazar a la humanidad (hasta dejarla así, al arbitrio de Satanás); en ya más de siglo y medio. En cuanto a la búsqueda y a la trascendencia espiritual de y al, amor de Dios. Lo mismo pasa, con Sigmund Freud (1856-1939; otro anticristo.) Al negar al alma; como directora de la espiritualidad humana; en su teoría del psicoanálisis y su doctrina del subconsciente; dándole al ego, una importancia que no tiene; y volviendo, todo en el cerebro, solo vibraciones eléctricas. Cuestión absurda; ya que, una cosa es su funcionamiento físico; y otra, su comportamiento espiritual. En otras palabras, en forma materialista; confundió lo ético, con lo psíquico. Desconociendo al alma, como rectora y única responsable, del comportamiento espiritual del hombre; pasando, todos esos atributos al ego, que nó es otra cosa, que solo el orgullo tácito (thymos); por el cual el hombre de hoy vive. Finalmente, se trata de saber exactamente, como proceder; saber como y a qué atenernos, de y por, los seres, que sí lo saben. O temer, aún más, a los que sabiéndolo, no creen. Estos, serán los pilares de la verdadera "Nueva Era del Amor"; la era de Jesús de Nazaret; en pensamiento y obra; que como hombres nuevos y de bien, practicaremos. (Más adelante volveremos sobre el tema.) Para por fin, saber y entender y/o, asimilar; que indirectamente; hoy, en el espacio-tiempo, ellos, trascienden (del futuro, *pues, a exa-velocidades, en Klmtrs/Seg., se inter-dimencionaron; y ahora estan en el futuro) ; de seres preadamitas; perfectos y sabios; que, se sublevaron a Dios; pero que, con la distancia y el paso del tiempo interdimensional; los salvos y los creyentes, mañana, serán perdonados, redimidos re-espiritualizados; o, transformados (en Cristo) a su condición: “Ente de Luz”, de las fuerzas del bien; con renovadas y revitalizadas: substancia y escencia divinas.

*Nota:

*Lo anterior, es otra de las razones, para explicar, el por que Dios, se encuentra, fuera, del universo conocido.


Nosotros y el estudio... frente a nuestro destino.

Nota:

- Hablando de la fortaleza del espíritu; frente a la debilidad humana: Tanta más escencia de Dios eres, cuanto más (substancia) ser como hombre te reconoces. - (Michel E. Señor de la Montaigne 1533-1592.)

Nota del autor:

Debemos temer al maligno (*pero, no obstante, sí, estudiar; o, conocer lo material, sin caer en ello; para luego, cognocer las cosas de Dios); y a los escritos de inteligencias súper-desarrolladas, del mal; tales como: Los escritos de Hegel, Marx, Kant, Friedrich Nietzsche, Sigmund Freud; y tantos otros (anticristo; declarados); controvertidos genios e “imitadores” falsos, de Jesús; pero, para su personal conveniencia, o sea, la del mismo Demonio. Será este, el umbral, antecesor a la "Súper-civilización"; que se avecina; y que, su llegada, (como lo es también la de Cristo) cada día es más inminente. Debemos por tanto, además, liberarnos de la ignorancia que esclaviza, como lo que más. (*Mat.7:7.)


Dentro de la súper-vivencia, se plantea como primera necesidad: Sobrevivir, corelacionada con el nivel de vida; la cual sin “Leyes”, es muy difícil y aún con ellas lo es. Aunque la raza humana, al menos en un mundo “civilizado”, ha vivido, digamos que un poco, por encima de niveles críticos; ya que muchas comunidades, han llegado a la pobreza, el hambre y la muerte; entre otras causas, a manos de forajidos; o, hombres sin Ley ni Dios. Hoy, descaradamente, adoptando filosofías baratas, y explotadoras del bien común. Haciendo, que lo habitual de las gentes, sea no tener lo necesario, sino, para medio comer. Dentro de un mundo pletórico de enemigos y de peligros; víctima de criminales de toda laya; inclusive, llegados al poder, elegidos, por el mismo pueblo cándido, como niño. Por ello, se tiene que abrir bien los ojos, a la hora de elegir a sus representantes. Ante todo, gentes de bien. Cultos y sin ambiciones personales; solo movidos por el bienestar de su representados. Por lo tanto, se hace necesario, además de pensar en Dios, estudiarlo, descubrir su voluntad y obedecerlo. Renacer la teología, como la ciencia reina de todas la demás. (Tomado en paráfrasis, de “Breve Historia del Saber”; por Charles Van Doren. Ed Planeta 2006. Págs. 163-165.)

Ahora, dentro, del concepto de la necesidad de Dios; se plantea otra gran incógnita ¿Cómo? La respuesta, también está en "La Biblia"; y en los demás “Libros *Sagrados”; se establece el - modi operandi - de cómo llegar al *sitio de donde venimos, una vez dejemos, el cuerpo, que transformado, con el alma (substancia divina); trascienda, con el espíritu (escencia divina); o sea, como "Ente-Luz"; de las fuerzas del bien; "escencia y substancia" de "Dios"; cuando dejemos el “Ser” mortal; y de naturaleza humana (hecho de barro mineralizado); para volver transformados, a existir como parte del "Ente-Luz"; o sea, con la misma "escencia y substancia fortalecida" en y con Dios; después del ya muy próximo “Juicio Final”. Nada difícil: Creyendo y cumpliendo con los diez mandamientos de la “Ley de Dios”; o, “Ley Mosaica”, por ser dictada e inspirada a él (Moisés) en el monte Sinaí.


Los diez mandamientos de la “Ley” de Dios.

Habla el Sombrero Ente luz:

Ese, debe ser el *objetivo, de todo ser viviente y racional; descubrirse, (mirando a su yo interior) a sí mismo y al hacerlo, descubrir a "Dios"; ya que, lo más pequeño y bajo, en la existencia humana; es su negación. Al negar a "Dios", nos estamos negando a nosotros mismos; como seres inteligentes. Para "Dios", es suficiente, que le reconozcamos, que le aceptemos; que le pidamos (como a un padre); que no lo olvidemos; y que cumplamos con sus "diez sencillos mandatos" (la misma Ley Mosaica.) - Que lo amemos, a pesar de todo y por encima de todo, en todo momento y lugar.

Porque, nuestra "alma", desde Adán, es, parte de la "substancia" divina; seremos (o, volveremos a ser) parte de la "escencia divina" (inteligencia pura) espiritual y trascendente (ya que, fuimos perdonados, por virtud del gran sacrificio de Cristo en la Cruz); pero, todo esto, depende de nosotros. - De nuestro comportamiento espiritualizado, superando, lo animal que nos impulsa y adhiriendo, lo espiritual que nos dirige. - En otras palabras: Fortaleciendo al espíritu, guardando la “Ley” Divina. - El estudio, que a unos ilustra y a otros confunde; hace sin embargo, que hoy la ciencia, acerque el pasado con el presente y aún con el futuro y en esa forma, nos une al Creador. - Luego, se debe tener en cuenta, a la historia, en sus dos fases; la divina y la humana; para no repetirla (la humana); y con experiencia, re-educarnos con el espíritu de Dios. Trocar y caracterizar, nuestra “mente” carnal y cambiante; por la “espiritualidad” permanente y divina de la “alma”; ya que, para esto fuimos creados! - ¡Para la gloria de Dios! Que por solo creer, ya se es (desde Adán) parte del pueblo de Dios; así, no ostentemos, ser parte directa del “El Linaje”: Adán, Lamec, Noé, Can, Taré, Abraham; todos de por allá, de la tierra de Ur (Irak.) - (Gen.2:7; Gen.4; Ese. 36:26-27; Jer. 43.); (S.Juan 14-6.)
Oración :

Señor, como divino alfarero,
transfórmame, modélame,
hazme parecido a ti, mi divino señor,
ayúdame y no permitas que nunca me aparte de ti.
A.G.

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